Degustación de ostras en la nieve. ¿Suena un tanto raro verdad? ¡Pues tal y como os lo cuento!
Hace un par de semanas nos desplazamos hasta La Vall de BoÃ, un conjunto de valles y sierras situados en la Alta Ribagorza (Lleida), para conocer la comarca y su estación de esquÃ. Boà Taüll Resort cuenta con las pistas de esquà situadas a mayor altitud de todo el Pirineo. Allà se celebraba la Quedada EsquÃ, un evento para esquiadores que pone el broche final a la temporada de nieve y donde, además de esquiar, puedes participar en numerosos eventos y actividades.
En cuanto llegamos a la estación alquilamos el material necesario y nos subimos a pistas a quitarnos el mono de todo un año esperando la nieve. Unas cuantas bajaditas para poner los cuerpos serranos a tono, y cuando quisimos parar un rato para hidratarnos y reponer fuerzas, ahà que me vi yo entre carnosas ostras del Delta del Ebro y unas cuantas cajas de cava.
Jajajajaja… si no lo veo no lo creo, ¡más glamour imposible!.
La ostras no son un bocado fácil para algunos. Muy queridas o muy odiadas, no a todo el mundo le gusta su «sabor a mar» y mucho menos su textura viscosa. A mà desde luego me pirran. No como ostras cada semana, pero las he probado muchas veces, y puedo decir que las ostras J. Prats son de lo mejor que he catado.
Aquello se puso de gente en poco tiempo que no os hacéis idea. Yo sufrÃa al ver a Jonathan y Albert abriendo ostra tras ostra con las manos desnudas y el frÃo que hacÃa. Pero oye… la gente (entre los que me incluyo) encantada. Un chorrito de limón y pa’ dentro :)
Para rematar la faena, qué mejor acompañamiento para la degustación de ostras que un poco de cava de la tierra Ventura Soler. Maridaba a la perfección y entraba solito, excelente para calentar el cuerpo (por dentro). Con la que estaba cayendo venÃa muy, pero que muy bien.
Según me comentó después del banquete, la familia de Jonathan siempre se ha dedicado al cultivo de ostras y mejillones. En el Delta del Ebro se da un crecimiento mucho más rápido de estos moluscos, lo que hace de ellos un producto joven y muy sabroso. Se dedican a la venta al por mayor y exportan al extranjero: Italia, Francia…
Hace un tiempo Jonathan y su amigo Albert comenzaron a trabajar en una idea innovadora: Musclarium. Se trata de un proyecto que combina el cultivo de ostras y mejillones con su degustación, directamente sobre las bateas en las que se cultivan. Arrancará este verano si todo va bien y prometo hablaros de él en cuanto lo tengan todo en marcha.
Mientras tanto, brindemos por esta pareja de emprendedores y porque todo les vaya a las mil maravillas. ¡Va por vosotros! (y por esa estupenda degustación de ostras…).
¡CHIN-CHIN! ;)
Cómo que suena raro, de eso nada, suena estupendÃsimo!! Después de cansar un poco el cuerpo, para aplacar la sed, no se me ocurre nada mejor (y mira que me he esforzado en pensar algo mejor jajaja…).
Por cierto, pero qué fotogénica eres preciosura! Hasta con gafas y gorro, mira que es difÃcil.
Vaya tela… ¡me quedo alucinando con este post! Nunca he probado las ostras, por lo que tengo entendido suelen sentar mal, asà que no he querido arriesgarme. Pero te aseguro que si hubiera estado ahÃ, ¡la cosa serÃa distinta!
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